Los mercados financieros mundiales han comenzado el Año Nuevo con una base sorprendentemente fuerte, tomando en cuenta que el Dow Jones, el FTSE 100 y el dólar estadounidense han superando y alcanzando niveles récord. ¿Por qué hay un optimismo sin precedentes tan temprano en el año? Los inversionistas esperan cambios significativos en los mercados financieros globales, como producto de los grandes cambios que se están produciendo en la política monetaria y gubernamental en todo el mundo.
Después de un impresionante 2016, ¿Hacia dónde se moverán los mercados?

Fuente: Bloomberg News (2016)
Con los primeros días de la presidencia de Donald Trump acercándose, el gobierno británico a punto de desencadenar el artículo 50 para abandonar la Unión Europea, los datos económicos mezclados procedentes de China, una guerra de suministro por los principales bienes del mundo y tasas de interés mundial en aumento, los inversionistas deben prepararse para pocas certidumbres, varios factores en contra y muchas oportunidades.
Para los mercados financieros globales, la Era del Banco Central, está llegando a su fin. Desde la crisis financiera, los bancos centrales han mantenido las tasas de interés en niveles históricamente bajos e incluso negativos para ayudar a asegurar el crecimiento y la inflación. El Banco Central Europeo, compra actualmente 84,000 millones de dólares en bonos gubernamentales y corporativos cada mes, el Banco de Inglaterra está comprando 545,000 millones de dólares en bonos del gobierno y deuda corporativa, y el Banco de Japón incluso tiene una posición significativa en los mercados bursátiles locales. Habiendo dominado el comercio en acciones, bonos y otros activos alternativos en los últimos años, a través de la flexibilización cuantitativa y la compra excesiva de activos, los inversionistas esperan que el desempeño económico sea un factor clave de crecimiento en lugar de únicamente la política monetaria. Esto refleja un regreso a un mundo en el que la información fundamental y el valor, que van desde la rentabilidad de la empresa, hasta el riesgo de crédito y las oportunidades de crecimiento, importarán mucho más que la palabra críptica de los banqueros centrales. Si bien esperamos que la recuperación económica se realice de forma paulatina y se mantenga estable durante la mayor parte del año, el endurecimiento de la política monetaria y la mejora de los fundamentos económicos en todo el mundo ayudarán a asegurar el crecimiento.
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Fuente: BMO Global Asset Management
Con esto en mente, esperamos que los mercados emergentes sean el foco de atención de los inversionistas expertos durante el 2017. ¿Por qué? Actualmente los mercados emergentes están subvalorados y ofrecen grandes posibilidades para un crecimiento económico rápido. Se prevé que el PIB real de las economías en desarrollo, crecerá un 4.6% este año de acuerdo con el Fondo Monetario Internacional, en comparación con el lento y doloroso pronóstico de crecimiento del 1.6% para las economías avanzadas. Esperamos una recuperación más fuerte de los exportadores de productos básicos en el corto plazo, con el índice Bloomberg Commodity que subió a casi el 12% en 2016 (el primer incremento anual desde 2010). Las perspectivas a largo plazo siguen siendo respaldadas por las cada vez mejor educadas, poblaciones jóvenes, mientras que inevitablemente, la clase media en ascenso propulsará el crecimiento impulsado por el consumo.
Nuestro dinero está en Brasil. El cambio del nuevo gobierno hacia la centro-derecha política, aunada a la continua implementación de iniciativas favorables para los negocios en práctica, ayudarán a reavivar la economía, señalando el fin de la era de la recuperación mediocre y catalizando un regreso a niveles impresionantes de crecimiento.
Con tantos vientos en contra ante a los inversionistas, hay algo de incertidumbre en los pronósticos para este nuevo año. Aún así, los mercados financieros globales han iniciado bien el 2017, con los inversionistas entusiasmados ante el potencial de las nuevas oportunidades. Mientras que las declaraciones públicas de los políticos y banqueros centrales sin duda influenciarán los mercados bursátiles a lo largo del año, serán los activos de valor fundamental los que establecerán los límites del mercado una vez que el constante flujo de información se asiente.