La tierra sobre la que caminamos es un recurso increíble, pero finito. Debido a que proporciona servicios invaluables para la humanidad, un suelo sano es esencial para la agricultura, el agua, la captura de carbono, y la gran biodiversidad que existe en el mundo actualmente. El mantenimiento y la mejora a nivel mundial de los recursos del suelo, es esencial para satisfacer la necesidad de la humanidad en materia de seguridad alimentaria, hídrica y energética. Los suelos son una de las bases fundamentales de la vida. Es innegable que el ecosistema vivo bajo nosotros tiene una gran importancia en la historia y el futuro del planeta Tierra.
A nivel mundial, el suelo es utilizado para la producción de biomasa, incluyendo la agricultura y la silvicultura, así como para almacenar, filtrar y transformar nutrientes, sustancias y agua. En un ecosistema próspero, el suelo sustenta la biodiversidad y ofrece una fuente de materias primas para varias especies. Hasta dos mil millones de microorganismos residen en un par de centímetros, proporcionando servicios esenciales como la regulación de los niveles de CO2, N2, O y CH4 en la atmósfera, la prevención de la desertificación y el alivio del calentamiento global.
Debido a la explotación de la tierra por la humanidad, este recurso está en problemas. La Organización de las Naciones Unidas para la Agricultura y la Alimentación estima que el 33% del suelo se degrada por erosión, salinización, compactación, acidificación, contaminación química sintética y agotamiento de nutrientes. 25,000 millones de toneladas métricas de tierra vegetal se pierden cada año, dejando las tierras que alguna vez fueron cultivables completamente improductivas. Si las tasas actuales de degradación continúan, toda la capa superior del suelo podría desaparecer dentro de 60 años. Esta es una preocupación importante ya que generar sólo tres centímetros de tierra vegetal toma más de 1,000 años.
.
Factores Clave Sobre la Salud del Suelo
Fuente: Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (2016)
.
Esto es especialmente problemático, ya que necesitamos incrementar la producción de alimentos aproximadamente en un 70% si queremos alimentar a la creciente población mundial para 2050. La agricultura convencional es una de las principales causas de la degradación del suelo. 45 millones de km² de la superficie terrestre ya se usan para cultivar alimentos, alimento de ganado, fibra y combustible, mientras que 100,000 km² de tierras de cultivo se degradan cada año debido al sobrepastoreo, al uso excesivo de agroquímicos sintéticos y a la industrialización. Estos agroquímicos sintéticos están compuestos de una amplia gama de materiales, incluyendo metales pesados. El exceso de nitrógeno y metales como el arsénico, el cadmio, el plomo y el mercurio pueden perjudicar el metabolismo de las plantas y reducir la productividad de los cultivos, lo que agrava la presión sobre las tierras cultivables. Cuando estos contaminantes entran en la cadena alimenticia, representan un gran riesgo para la seguridad alimentaria, los recursos hídricos, los medios de subsistencia rurales y la salud humana. Esta contaminación cuesta unos $10.6 billones anuales en pérdida de productividad y daños ambientales, sin mencionar los costos en la atención de la salud. Si la situación continúa, corremos el riesgo de producir un 30% menos de alimentos durante los próximos 20 años.
.
Disponibilidad de Nutrientes en los Suelos
Fuente: Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (2016)
.
.Nuevas prácticas agrícolas y de conservación son de suma importancia para la salud humana y la integridad estructural del sistema alimentario mundial. Un suelo sano reduce el riesgo de inundaciones, ya que puede almacenar hasta 3,750 toneladas de agua por hectárea, que equivale a una alberca y media de tamaño olímpico! El Panel Internacional sobre el Cambio Climático afirma que el 89% de todas las emisiones agrícolas pueden ser mitigadas a través de la mejora de la salud del suelo. De acuerdo con la FAO, los suelos sanos también fortalecerán el rendimiento de los cultivos y aumentarán el valor nutricional de nuestros alimentos.
El suelo es un recurso no renovable que debe ser protegido y conservado para las generaciones futuras. La agricultura convencional ha obstaculizado los procesos naturales que nutren los cultivos y capturan el carbono en las tierras cultivadas. Por esto, Primordiales esta formando un sistema agrícola que protege y nutre el suelo mientras ahorra miles de millones de dólares en insumos sintéticos con el objetivo de proteger el planeta y nuestra salud. El Nim es una de las soluciones más poderosas que se utiliza en todo el mundo como pesticida natural que mejora la salud y la fertilidad del suelo.