Los Pesticidas Sintéticos Dañan la Salud Global

junio 15, 2017

De acuerdo con los especialistas en alimentos de la Organización de las Naciones Unidas, la Organización Mundial de la Salud y el Foro Económico Mundial, la implementación de un sistema alimentario ambientalmente sostenible es una prioridad internacional para el desarrollo de la salud y la seguridad alimentaria a nivel mundial. A medida que los inmensos daños ambientales y sanitarios de la agricultura convencional se vuelven más visibles, las organizaciones internacionales están respaldando cada vez más los sistemas de alimentos orgánicos.

La última revisión de la investigación científica del Parlamento Europeo, mantiene que ingerir alimentos con altos niveles de plaguicidas sintéticos afecta directamente el desarrollo del cerebro a través de la población en general. Al menos 100 de los plaguicidas sintéticos que se encuentran actualmente en el mercado mundial son conocidos por causar trastornos neurológicos. Un estimado de 13 millones de puntos IQ se pierden en la Unión Europea anualmente como resultado de los plaguicidas sintéticos, lo que representa un costo aproximado de $140 mil millones de dólares al año. Los niños están particularmente en riesgo. Es probable que los niños cuyas madres tenían en su cuerpo rastros de metabolito organofosforado, la base de muchos plaguicidas sintéticos, durante el embarazo sufran de “desarrollo mental adverso a los dos años, problemas de atención a los tres y medio y cinco, y un menor desarrollo intelectual a los siete “.

 

June_15_2017-Chart1_Esp-01

Fuente: Red  Norteamericana de Acción Contra Pesticidas (2012)

.

Se sabe que la exposición a plaguicidas sintéticos causa muchos problemas de salud que amenazan la vida, como problemas reproductivos hasta defectos de nacimiento, estos siguen siendo una parte importante de nuestro sistema alimentario global. ¿Por qué? Hasta el 40% de la producción potencial mundial se pierde anualmente debido a los efectos de las malas hierbas, las plagas y las enfermedades. Estas pérdidas de cosechas se duplicarían si el uso de plaguicidas existente fuera abandonado por completo. Si hubiera una reversión a los métodos agrícolas tradicionales, muchas vidas se perderían y se producirían grandes daños ambientales. No se puede negar que los plaguicidas son necesarios para mantener la seguridad alimentaria mundial, especialmente durante un período de crecimiento de la población sin precedentes; la clave es implementar métodos sostenibles. La gran cantidad de evidencia acerca de los impactos en la salud a causa de la exposición a plaguicidas sintéticos, es una muestra clara de los procesos fallidos de pruebas y aprobación en todo el sector. Es casi inconcebible pensar que los productos que contienen productos químicos que podrían perjudicar seriamente el desarrollo del cerebro y del cuerpo podrían ser aprobados después de un promedio de 12 años y $255 millones de dólares gastados en investigación y desarrollo para nuevas soluciones de cuidado de cultivos sintéticos.

Afortunadamente, la agricultura orgánica y las soluciones naturales en el cuidado de los cultivos son alternativas seguras y sostenibles al sistema moderno, dominado por agroquímicos sintéticos. Mientras que el impacto de los alimentos orgánicos en la salud humana es un campo relativamente nuevo de investigación, los estudios iniciales compilados por el Parlamento Europeo muestran que los alimentos orgánicos pueden reducir el riesgo de enfermedades alergénicas y obesidad, al tiempo que reducen la resistencia a los antibióticos. Dado que los sistemas orgánicos de agricultura no dependen de insumos sintéticos, los riesgos asociados de exposición y degradación ambiental se reducen drásticamente. Otros beneficios incluyen la disminución del uso de energía, menos emisiones y reducción del filtramiento de nitrógeno en la tierra. Los consumidores de estos alimentos también tienden a tener patrones dietéticos más saludables en general.

June_15_2017-Chart2_Esp-01
Fuente: Asociación de Comercio Orgánico (2017)

.

Los consumidores informados están viviendo un estilo de vida cada vez más saludable y su elección de alimentos orgánicos esta dando forma a un mercado mundial valuado en $80 mil millones de dólares en 2015. Las ventas de alimentos orgánicos en los Estados Unidos alcanzó un nivel récord de $43 mil millones de dólares en 2016, representando más del 5% de las ventas totales de alimentos. Esto significa un aumento del 8.4% con respecto al año anterior, superando completamente el crecimiento del 0.6% en el mercado global de alimentos durante el mismo período.

El crecimiento, las ganancias y la demanda de los consumidores, están alcanzando niveles sin precedentes para las empresas que buscan hacer coincidir su propósito con el beneficio ofreciendo productos y servicios que den prioridad a la responsabilidad social y protejan el medio ambiente. Es por eso que en Primordiales estamos impulsando una Nueva Revolución Verde con el árbol de Nim. Los productos a base de Nim en la agricultura revolucionarán la forma en que se cultiva y procesa nuestro alimento, proporcionando una alternativa natural no tóxica, redituable y sostenible ante los pesticidas sintéticos dañinos. A medida que los consumidores estén más informados sobre los riesgos para la salud y el medio ambiente causados por los alimentos que comen, la comunidad mundial cambiará a métodos seguros y orgánicos de protección y producción de cultivos, con el Nim en primer plano.